Pregunta. ¿Cuál es su visión de la agricultura actual?

Respuesta. La Revolución Verde ha sido fundamental para conseguir la expansión de la población. La combinación de energía barata y tecnología ha permitido multiplicar el rendimiento. Sin embargo, ese éxito ha convertido en inviable la agricultura tradicional, sus precios son inasumibles. En la agricultura ha ocurrido lo mismo que en la gastronomía: al imponerse el modelo McDonald's se ha ido uniformizando todo y han ido desapareciendo los platos locales. La agricultura tecnificada ha hecho desaparecer también la agricultura tradicional.
 
P. ¿Y por qué considera que eso es un problema?

R. La agricultura tecnificada está basada en la energía barata y eso está cambiando. El encarecimiento de la energía nos va a obligar a volver a la agricultura tradicional. Hay que volver a vincular la ciudad con la alimentación. Hay que empezar a recuperar la conexión de las ciudades con su territorio y volver a los canales de consumo cortos, al consumo local. No es cuestión de ideología, sino de superviviencia.
 
P. ¿Cómo se conecta de nuevo a las ciudades con la alimentación?

R. El futuro de la agricultura está en comprender el pasado. Necesitamos recuperar los conocimientos tradicionales e históricos, actualizándolos a los nuevos tiempos. Durante siglos se han estudiado los flujos del agua, del sol, de la reposición de nutrientes. Esto es también alta tecnología. Y hay que recuperarla.